jueves, 6 de agosto de 2009

ENSAYO FILOSÓFICO : ACERCA DE JORGE LUIS BORGES

CARTOGRAFIAS BORGIANAS

David Alberto Fuks


"El mapa pierde su vocación primera de querer representar
un territorio" ( Félix Guattari)


I. En su artículo "El desierto,el libro:de J.L.Borges a E.Jabès", Rosy Pinjas Delpuech (1) formula una serie de vinculaciones entre ambos autores a quienes considera unidos,mas allá de sus diferencias,por una misma interrogación lancinante del espacio,del universo, del desierto,del libro y de la escritura.
Para Pinjas-Delpuech el desierto borgiano no tiene ninguna realidad espacial y cuando aparece vinculado geograficamente,no guarda ninguna relación con los mitos,con el espacio y con el tiempo que le son propios a estas geografías;posee un aspecto infinito e inconcebible como mapas infinitos e irreales,poblado de objetos imposibles de imaginar y realizar. Es un objeto puramente negativo,lugar monstruoso e insoportable (abominable al hombre,vizcoso,su arena es negra e ignorada,es parte de regiones bárbaras habitadas por seres mas cercanos a las bestias que a los humanos.
En cuanto al libro borgiano (intercambiable con la noción de Universo) "la situación no es mas brillante",dice la autora,puesto que estos libros nada significan en sí,son ilegibles,no auguran nada,reenvían a otro libro o a una palabra divina indescifrable ("intercambiabilidad ambigua entre El Libro de Arena y la Biblia") y ,en fin, tanto ellos como el destino humano están regidos por lo arbitrario absoluto.
Ambos objetos-desierto y libro-son insoportables,afirma Pinjas -Delpuech,pues forman parte de un infinito geométrico duplicado por la circularidad cerrada (preexistente a todo signo) que es inaccesible al hombre,que excluye toda historia,todo comienzo, todo quiebre y todo trazo.
Luego la autora,apoyándose en Derrida (la cesura hace hace surgir el sentido),confronta la obra de Borges con la de Edmond Jabès,para quien la destrucción del libro (estallido de la totalidad), desnuda la superficie del texto e inaugura una lectura.
En cuanto al desierto jabesiano,éste es el lugar de la página en blanco donde toda noción de eternidad e infinito está perimida pues este vacío espera al vocablo,al fragmento,a la ruptura que permita el estallido de las totalidad sin lo cual no habría historia,palabra o escritura.Es el espacio privilegiado que aunque infinito dá la espalda al imaginario geométrico de las ficciones borgeanas.
Son,para Pinjas-Delpuech,dos visiones irreconciliables del espacio y del libro,aunque ambas enseñen la imposibilidad-ilegibilidad del libro :"Libro de Arena,demasiado pleno,demasiado dicho,nada dicho.Suma de todas las palabras,de todos los libros que se inscriben sobre un campo de ausencia y de fracaso.....Libro de las preguntas,en búsqueda de un punto,como un obstinado Arquímedes en busca de un grano de arena que rompa el silencio monstruoso".
Hasta aquí,la autora,quien ha leído a Borges,que se consideraba a sí mismo un amanuense,depositario de una ficción:"La lectura que luego se haga de esto es diferente".

II. Lo que en Pinjas-Delpuech principia como confrontación polémica parece diluirse en una visión apologética de Jabés a la cual la autora arriba luego de establecer algunos contrastes binaristas con Borges y convirtiendo ambas obras en grandes opus totales,adheridas a una imago mundi del cosmos-raíz,allí donde puede encontrarse un caosmos-raicilla.En este sentido, la conceptualización guattariana concibe al libro "tanto mas total cuanto mas fragmentado". La disparidad en el estilo,el género y la orientación de la temática nos permite dudar de la legitimidad de semejante confrontación,fundada en la supuesta identidad de objetos físicos (desierto,libro),que por sí sola no garantiza (aún si aceptaramos tal lógica confrontativa) la confrontación entre pares homogeneizables con violencia,forzadamente alineados.Jabès conceptualiza sobre el libro desde el interior de un género inclasificable en el que a menudo prima lo aforístico por sobre lo argumental.Borges no conceptualiza sobre el libro o el desierto.Si se quiere,estos son sus personajes.
El desencanto de la autora por una antinomización que ella fuerza, está en parte condicionada por su vocación homogeneizante que,precisamente,desperdicia otra oportunidad,aquella que podría pensarse desde un singular encuentro de heterogeneidades cartográficas.
Le aflige a Pinjas-Delpuech que desierto o libro borgiano no sean el calco del mapa jabesiano
Algunas de sus argumentaciones recuerdan a aquellas de Borello (2) para quien Borges rechaza la historia y la posibilidad de transformar la realidad al negar la posibilidad de comprenderla objetivamente y al postular la reiteración cíclica del tiempo.Nicolás Rosa llama a esto la combinación de una ética de izquierda a nivel de lo político y una epistemología de derecha:"un prejuicio positivista:el principio de verificación realista"."El mundo,dirá nuestro autor,desgraciadamente es real,yo desgraciadamente soy Borges".Borges construye lo real "como Spinoza construye a Dios"(3)
Para Pezzoni (citado por G.Massuh) Borges alude a una realidad dificilmente descriptible.
Comparto la opinión de quienes afirman que el abordaje de la obra de Borges debe evitar toda voluntad de búsqueda de una verdad filosófica allí donde el pensamiento existe como relato y no como intento de resolución de un problema.Para Juan Nuño (4) a tal intento le acechan tres peligros:agostamiento,rigidez e imputación,que es el riesgo de los esquemas que pretenden atribuirse el papel de sistemas.Es el mismo Borges quien advierte:"En el decurso de una vida consagrada a las letras,y (alguna vez)a la perplejidad metafísica,he divisado o presentido una refutación del tiempo,de la que yo mismo descreo,pero que suele visitarme en las noches y en el fatigado crepúsculo,con ilusoria fuerza de axioma".
Hay en Pinjas-Delpuech resistencias a renuciar a cierta vocación de verdad y concederse a lo lúdico literario,a "los exquisitos sofismas" (5) ," paradojas" (6), y,"carácter irónico" (7) que para la crítica norteamericana de los sesenta significa destrucción de la realidad ( G.Massuh) que en Borges eran "desesperaciones aparentes y consuelos secretos" (8).
Para G.Massuh (9), se equivoca tambien A.M.Barrenechea quien concibe a un Borges ocupado en hallar alguna verdad metafísica "pero lo cierto es que él nunca ha pretendido revelar verdades supremas ni elaborar una ontología" ni manifestar "una fe íntima en un principio totalizador".
La autora construye series sucesivas de objetualidades borgianas negativas,allí donde los fragmentos literarios en que se apoya son pensados como paradigmáticos,si se quiere,pero en todo caso,se escamotea su concepción como términos rotos de escritura en los bordes (mas que como mecanismo de contradicción, según lo describe E.Pezzoni) lo que propone nuevos lenguaje y escritura,por ejemplo,desde la perspectiva de la multiplicación de lo imaginario.No obstante,Pinjas-Delpuech prefiere ver en la creación borgiana una literatura del simple engaño, una supuesta arbitrariedad no augurante y queda presa de supuestos elementos objetualizables que necesariamente deberían tener un sentido,casi diríase que se advierte una exigencia de moraleja. .
No hay tal circularidad borgiana como empresa ideológica,hay pluralidad de situaciones literarias,a partir de las cuales, algunos lectores produciremos al agenciarlas colectivamente o al despojarlas de significaciones dominantes,haciéndolas fugar como aspectos,por ejemplo,de nuestra subjetividad que a menudo se nos presenta fantasmáticamente bajo la modalidad de una encerrona,de vivencias de repetición sentidas como destino insoslayable,de cierta concepción trágica de la condición humana
El sur,por ejemplo, no escapa a su realidad espacial geográfica sino por medio de una nueva producción de sentido (si se nos permite esta licencia)historiográfica que ,en Borges, es ,insistimos,multiplicadora de territorios que para ningún autor de ficción no existen en ningún atlas.¿O acaso el Sahara de la juventud jabesiana un referente cautivo en las diferentes nociones de desierto del autor judeoegipcio.Su cartografía,insistimos, borra las fronteras entre la fantasía y la razón,entre sueño y vigilia,entre yo y no yo.Si el desierto de Edmond Jabès es el lugar de la página en blanco,donde toda noción de infinito o de eternidad está perimida pues "este vacío espera al vocablo,al fragmento, o a la ruptura",no lo es menos la pluralidad de escenarios borgianos :"La figura del bárbaro que abraza la causa de Ravena,la figura de la mujer europea que opta por el desierto,pueden parecer antagónicos.Sin embargo,a los dos los arrebató un ímpetu secreto,un ímpetu mas hondo que la razón,y los dos acataron ese ímpetu que no hubieran sabido justificar." (Historia del guerrero y la cautiva)
El conocimiento del secreto de la totalidad,que la autora atribuye a los personajes borgianos,pueden ser pensados justamente en este sentido pero tambien como realización de deseo (la no bella moderna mitología del subconciente,según Borges) de esa condición humana que está sujeta a las grietas,a las rupturas,a las fragmentaciones de modo constitutivo.Pero casi seguramente la autora ignora partes considerables de la obra de Borges,allí donde algunos de sus personajes son claramente refractarios a toda clausura dada por mecanismos autosuficientes.Esta es,si se quiere,nuestra impresión de esta pretensión de universo que Pinjas-Delpuech cree ver en Borges y nosotros en sus personajes.Pero tambien hay quienes ,como en la obra de Ts'ui Pen,se confrontan con diferentes desenlaces,porvenires y tiempos que rompen esta circularidad. Así,como afirma Deleuze,Borges va mas allá del comentario de libros imaginarios cuando considera un libro real-Don Quijote- como si fuera un libro imaginario:"De esta manera,la repetición mas exacta,la mas estricta tiene como correlato el máximo de diferencia"(10)al igual que en La lotería en Babilonia ,la repetición, está lejos de ser circularidad como mismidad, sino eterno retorno que afirma "todo lo múltiple,lo diferente y el azar"(11) por sustracción de lo único de la multiplicidad.Para Jabès,justamente,el trazo es,ante todo,el signo menos.
Libro o desierto entero,universal,circular versus legibilidad,quiebre constitutivo,etc.es una confrontación reduccionista,empobrecedora.

III. No hay un Borges,así como no hay una objetualidad negativa o una circularidad inaccesible al hombre .Hay multiplicidades que operan por sustracción del un .En "El disco" -toda una tentación para paradigmatizar la circularidad,el disco hace mapa con la mano que lo sostiene.Borges construye una cartografía.El disco posee un solo lado que hace rey al poseedor,pero su posesión no está negada al leñador.La circularidad del disco de un solo lado se abre a la posibilidad de la permanente búsqueda.Se podría pensar que lo no hallado es,por ejemplo,el poder de ser rey,pero tambien,mediante el disco se accede a la búsqueda permanente,lo que no es poco en alguien que no buscaba nada antes del encuentro con el disco.¿No es acaso este un personaje que,lejos de someterse a un infinito geométrico, accede a la historia?.El Libro de arena,¿ no augura nada,o augura nada?.Tambien Jabès escribe acerca de la "desnudez augural" del libro leído.
En "Las ruinas circulares" el protagonista espera que el disco lunar sea perfecto para reanudar su tarea y en un anfiteatro,tambien circular ,reúne alumnos que a veces arriesgaban una contradicción razonable .Tambien desea soñar un hombre con integridad minuciosa,"sin embargo la catástrofe sobrevino ".Se trata de un hombre que habita un templo inhabitado y despedazado y posteriormente destruído por el fuego,pero su historia recomienza desde que habita en esa,digamos, fragmentación,porque tambien la fragmentación lo habita.Lo circular formal no garantiza la oclusión y el círculo estalla multiplicándose.Las ruinas se desterritorializan.
Expresiones de la angustia, a pesar que su supuesta ausencia en Borges desesperó a Sábato.
Vizcosidad no es sinónimo de indefinición,como quiere Pinjas-Delpuech.Sí-entre otras cosas-caos posibilitante,materia incoherente y vertiginosa como la que compone los sueños,y lo soñado no es caos arbitrario, es multiplicidad.El personaje pretende que el propósito de su vida esté colmado,desea que en su condición de soñado haya alivio pero no se libera del terror y la humillación que subvierten su pretendido orden.
Es aquí donde el mapa pierde su vocación primera de querer convertirse en territorio."La lógica de los conjuntos discursivos,dice Guattari,deberá pues aceptar de buena gracia antes,procedimientos cartográficos capaces de posicionar singularidades y procesos de singularización"(12)
En "El libro de arena" Borges inicia el relato afirmando su veracidad.Es precisamente esa intención engañosa de more geométrico la que anuncia el desmoronamiento de un sistema lógico formal que da paso a la ficción,al proceso inmanente que destruye el modelo y esboza un mapa que borrará las fronteras entre la fantasía y la razón ("un pasado que yo pueda presumiblemente conocer ",decía Borges (13) .Recurso por demás apreciado por Jabès quien hace sostener a sus personajes rabínicos posiciones spinozianas:
"-Dame un ejemplo del humor de Dios.
-El hombre.
-Dame un ejemplo del humor del hombre
-Dios,escribió reb Nassif.(14)
¿Acaso estos rabinos guardan alguna relación espacial o temporal,tal como lo pretende Pinjas-Delpuech para con los personajes borgianos?.De objetos imposibles está habitada toda la literatura.
"Totalidad imposible del texto borgiano","monstruosa ilegibilidad",dice N.Rosa (15)
IV.Admiramos en la obra de Jabès aquello que Pinjas- Delpuech destaca pero preferimos hacerlo con Borges y no contra Borges .La imposible adecuación,la imposible semejanza de la que habla Jabès:"Osarios,conozco todos vuestros nombres podridos en los abismos del Nombre".El (los) desierto(s) jabesiano de donde surge el trazo y el punto ¿no es acaso parte de aquella lejanía conveniente,de la que Borges hablaba,para que la imaginación esté mas libre?.Borges admite que el atributo ficticio del libro lo hace aparecer como un tesoro pero que sin embargo llega a enloquecer a quien lo tiene,del mismo modo que reconoce la idea "desde luego,quizá falsa,de que puede existir un instante en el cualesté contenido todo el pasado" (13).Borges reconoce la responsabilidad del lector en,como quería Jabès,"abrir el círculo y transformarlo en interrogación,en punto,en punto de interrogación",al decir que el hecho poético cambia cada vez que leemos un texto,que éste puede ser interpretado,leído y sentido de diferentes modos, y que no ofrece respuestas definitivas,no excluye la palabra por llegar. Despoja así al libro o al desierto de su carácter metafísico por el recurso a la metafísica puesta al servicio de lo imaginario.
Notas
(1)Rosy Pinjas-Delpuech es docente de la Univ.Ben Gurion de Beer-Sheva.Su trabajo "Le desert,le livre:de J.L.Borges à E.Jabès" fue leído en el coloquio "Los lugares de la escritura/la escritura del lugar",Univ.de Tel-Aviv,1982 y publicado en "Jabès,le livre lu en Isräel",Ed.Point Hors Ligne,Paris,1987.
(2)Rodolfo A.Borello,La narrativa fantástica,CEDAL,1968.
(3)Gabriel Barpal:"Yo que soy el Es,el Fue,el Será",Conversación con Leopoldo Katz,en Destiempo de Borges,Gaceta del F.C.E.,1986.
(4)Juan Nuño,La filosofía de Borges,F.C.E.,México,1987.
(5)E.M.Cioran,Exercises d'admiration,Paris,Gallimard,1986.
(6)Maurice Blanchot,El infinito literario:el Aleph,en Destiempo de Borges,Gaceta del F.C.E.,1986.
(7)Enrique Anderson Imbert,La Nación,22-5-1986.
(8)Juan Nuño,op.cit.
(9)Gabriela Massuh,La crítica sobre Borges
(10) (11)Gilles Deleuze,Diferencia y Repetición
(12)Félix Guattari,Cartographies schizoanalytiques,Galilée,Paris,1989.
(13)Borges,El poeta y la escritura,Clarín,Cultura y Nación,26-1-1989.
(14)Edmond Jabès,El libro de las preguntas,Siruela,Madrid.1991.
(15)Nicolás Rosa,Los fulgores del simulacro,Cuad.Ext.Universitaria,1987..

David Alberto Fuks .

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